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Dirigiéndose a un mar de jóvenes adultos reunidos en la conferencia anual Passion 2025, Ben Stuart, pastor de Passion City Church en Washington, D.C., transmitió un mensaje de redención, esperanza y misión renovada, instando a los asistentes a abrazar la fidelidad y superar la vergüenza a pesar de sus defectos.
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Basándose en Juan 21, Stuart desgranó la narrativa de la restauración de Pedro por parte de Jesús después de su devastadora negación, enmarcando la historia como un llamado a los creyentes a superar la vergüenza y avanzar hacia el propósito que Dios les dio.
“La fidelidad”, comenzó Stuart, “es a lo que Jesús nos llama, incluso cuando nos quedamos cortos”. Puso de relieve la historia del regreso de Pedro a la pesca, la pesca milagrosa y la pregunta inquisitiva de Jesús: “¿Me amas?”.
Stuart enfatizó el enfoque lleno de gracia de Jesús hacia Pedro, señalando que incluso en el momento de mayor vergüenza y fracaso de Pedro, Jesús no lo dejó de lado. En cambio, recreó las circunstancias de su primer encuentro, utilizando una pesca milagrosa para recordarle a Pedro su llamado original.
“Él recrea el momento de la conexión”, dijo Stuart. “¿Cómo te trata Jesús cuando vuelves a hacer lo que juraste que nunca volverías a hacer? Él viene por ti. Te llama de nuevo. Recrea el momento de la conexión y, al hacerlo, dice que la puerta sigue abierta, que la relación no se ha perdido. ‘Sigo conectado contigo. Todavía te deseo’”.
“Eso es lo que le hace a Pedro, y eso es lo que les está haciendo a muchos de ustedes, que cuando llega el momento, y dices: ‘Lo hice de nuevo. Tomé estas decisiones. Fui a lugares oscuros, tristes y destrozados, Dios me ha desterrado’. No, Él aparece en la orilla y te llama a casa. La relación sigue abierta”.
El pastor agregó que las acciones de Jesús fueron deliberadas, tanto al recrear el milagro como al abordar directamente la negación de Pedro, para que Pedro pudiera enfrentar su vergüenza y avanzar en libertad.
Stuart describió el fuego de carbón alrededor del cual Jesús y Pedro se encontraron en Juan 21, destacando su significado simbólico.
“Solo hay dos fuegos de carbón en la Biblia”, explicó Stuart. “El primero fue cuando Pedro negó a Jesús tres veces, y el segundo fue cuando Jesús lo restauró. Jesús recreó el momento del fracaso de Pedro, no para avergonzarlo, sino para sanarlo”.
Stuart relató encuentros con personas que se habían alejado de la fe, cargando con el peso de sus errores pasados.
“Recuerdo haber estado hablando una vez con un tipo que estaba borracho, y cuando se enteró de que yo era pastor, dijo: ‘Solía estar en Young Life’. Luego se quedó en silencio, mirándose a sí mismo como diciendo: ‘¿Qué pasó?’”, dijo Stuart. “Ese es Pedro en esta historia. Él pregunta: “¿Qué pasó?” Y la respuesta de Jesús es aparecer y llamarlo a casa”.
La vergüenza, enfatizó el pastor, puede paralizar a las personas y robarles su futuro. “El enemigo quiere robarte el futuro recordándote los pecados de tu pasado”, dijo. “Pero Jesús pone Su mano sobre la herida, no para lastimarte, sino para sanarte”.
Stuart reflexionó sobre las interacciones divertidas de Jesús con los discípulos después de Su resurrección.
“Él los llama ‘niñitos’ y les pregunta: ‘¿No tienen pescado, verdad?’”, dijo Stuart. “Es una manera amable de mostrarles que su manera no está funcionando. Él no desdeña su pecado, pero tampoco es severo. En cambio, les cocina el desayuno. ¿Por qué? Porque comen con gente que les agrada”.
Al pasar de la restauración a la misión, Stuart enfatizó que Jesús no solo restauró a Pedro; lo volvió a comisionar.
“¿Qué le dice Jesús a Pedro después de preguntarle si lo ama? No lo arrastra de nuevo a la vergüenza. Le dice: ‘Apacienta mis ovejas’. Llama a Pedro a seguir adelante con su misión”.
Stuart recordó a los asistentes lo que está en juego en su fe y las necesidades del mundo que los rodea.
“Hay ovejas que están sufriendo: personas en sus universidades, escuelas secundarias y pueblos que necesitan la esperanza que ustedes llevan”, dijo. “Dios no los está llamando de regreso al bote para pescar. Los está llamando a cuidar de Sus ovejas”.
Advirtió que no se debe permitir que la vergüenza o las distracciones los marginen, y agregó: “No permitan que la vergüenza les robe el futuro que Dios tiene para ustedes… y tampoco permitan que las comparaciones los detengan. Cuando Pedro preguntó por Juan, Jesús le dijo: ‘¿Qué te importa a ti? Sígueme tú’. Ese es el mensaje para todos nosotros”.
Stuart concluyó dirigiéndose a aquellos que podrían sentir que el mensaje de gracia y misión de Jesús no es para ellos. “Puedes pensar: ‘Pedro traicionó a Jesús, pero ustedes no saben lo que yo he hecho’. Déjenme decirles algo: Jesús pagó por ese pecado. Fue a la tumba con él y resucitó para ofrecerte vida”.
“Él te está llamando de nuevo a la relación, de nuevo a la misión”, concluyó. “No te retires. Lánzate al mar como Pedro y nada hacia Él. Él te está esperando en la orilla”.
El Movimiento Passion, iniciado en 1995, tiene como objetivo “convocar a estudiantes y líderes de universidades de todo el país y ciudades de todo el mundo a vivir por lo que más importa”. A lo largo de los años, Passion ha donado más de 18 millones de dólares a 70 organizaciones asociadas de todo el mundo.
La primera parte de Passion 2025, dirigida a jóvenes de entre 18 y 25 años, se celebró del 2 al 4 de enero, y la segunda parte del 6 al 8 de enero. El tema de la conferencia de este año fue “Por Su Renombre” y contó con la participación del fundador Louie Giglio, Sadie Robertson Huff, Jackie Hill Perry, Jonathan Pokluda y otros, con música de Brooke Ligertwood, Kari Jobe, Cody Carnes, KB y Passion Music.
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