Verstappen y el rival con el que ahora “moriría de un ataque al corazón”

Max Verstappen ya es una leyenda de la Fórmula 1 y tiene a sus espaldas cuatro títulos mundiales que lo abalan. Todas las historias tienen un comienzo, y en este caso la del neerlandés arrancó en 2021, concretamente en la última vuelta de la última prueba en Abu Dhabi. Desde aquel momento hasta el día de hoy, se ha convertido en tetracampeón y ha agrandado su figura en el Gran Circo. Después de conseguir su cuarto trofeo, ha echado la vista atrás para recordar aquel duelo final.

Una de las rivalidad más fuertes de los últimos años, sino la que más, fue la del de Mercedes y la del de Red Bull. Esta llegó a su punto álgido en la temporada en la que Max consiguió el primer título de su carrera en la máxima categoría del automovilismo. La tensión que se vivió esa campaña GP tras GP no se ha vuelto a repetir y llevó todo a decidirse en la última vuelta. Entre risas ha querido recordar este momento el ‘1’, pero en aquel momento no era un tema para reírse, pues estaba todo en juego.

La gran batalla entre Hamilton y Verstappen

Esta prueba marcó el comienzo de la leyenda, pero fue un momento muy polémico y en el que nada se resolvió hasta los últimos instantes. Esto hace que para el espectador sea un espectáculo tremendo, pero en el caso de los protagonistas, por lo menos el de Red Bull, no quiere volver a vivir algo así: “No quisiera volver a vivirlo. Para mi revivir mi primer título, creo que ese día moriría de un ataque al corazón”.

Las emociones fuertes es algo con lo que conviven día a día los pilotos, pero este caso fue muy extremo. En esta charla en el programa de la firma de bebidas energéticas ‘Talking Bull’, aseguró que no se suele poner nervioso en los momentos previos a salir a pista, pero aquel día sí lo estaba. Aunque el no lo notase, la gente que le rodeaba sí: “Mi novia Kelly vino a mi habitación antes de la carrera, y ella dijo que tenía las manos heladas”.

Verstappen siempre tendrá un gran recuerdo de una actuación tan grande como aquella, o como, por ejemplo la más reciente, en Brasil con una remontada que ya es historia de la F1. Pero, ni de lejos le gustaría volver a vivir lo que siente en estos días tan señalados: “Son increíbles de ver, pero no para revivir”. Todavía le quedan grandes días en su andadura por el Gran Circo, pero no lo pasa nada bien cuando la tensión se eleva a niveles de ese calibre.